Saturday, May 12, 2007

BIB AZAHAR 11
Mujer de besos

Sea culebra en tu piel
mi lengua haciendo su juego,
te quiero ver traspasada
de alfileritos de fuego.
Te quiero ola que brama
por las rocas de mi estero,
para aguantar tu estampido
dolor de mujer de besos.
Yo me iré donde tú vayas
como burbuja en tu viento.
Me quieres barca encallada
en los surcos de tus senos,
y precisa de mi quilla
cada poro de tu cuerpo.
Es justo que aquí muramos
locos de amor y de sexo,
y gritemos a las ondas
los delirios de este encuentro.
Te quiero ver traspasada
de alfileritos de fuego.

*

La Música

Con una caricia modulada, delicada y firme
vibra el alma del instrumento,
como el humo de un pitillo
se hilan en el aire las emociones
en volutas redondas como perlas,
como fútiles pompas jabonosas de un sueño,
jaula de margaritas,beso prisionero en el aire.

Flotan en el viento sonoro las sedas elegantes
como cometas que ascienden ondeando en sus arpegios.
Amores náufragos en sus cinturas
con sus fuegos ascendentes
hasta la matriz de las almas.

El instrumento devuelve generoso
por cada caricia un arco iris de sonidos
y un trance intercalado.
Una ilusión bordada en ojos núbiles.
Un sutil sortilegio.
Una armonía de mundos y submundos
en carnaval de sonidos.

La respiración se hace hilo
mientras el corazón vive o agoniza,
el cráneo se hace caja sonora
y el pulso se electriza.
Las pasiones sugeridas alteran el flujo de la sangre
para vivir sus éxtasis
en lenguas de fuego hechas coro.

La armonía es adorada en el templo del pecho
como doncella vestal que esparce pétalos
al ofrendado oyente
entre rumores musicales.

*

Música en el aire,
en el cielo y en tus ojos


I

La música es como el aire
que rodea el planeta del oído.
Espíritu que navega cargado
con el éxtasis que ilumina la vida
en las noches tachonadas de estrellas,
porque su sombra es un mar
con arena de diamantes.
A veces, se hacen cristal en una lágrima.

II

En el cielo se hacen jardines con rosales de notas
Ay, como se baña en su claro chorro la dama.
Ahí va la romería en que lo sutil es el buey
en su yunta cargado de embelesos,
porque sus flores al oído producen milagros.
Venid a ver cómo baila la música en su fuego,
venid a ver cómo en el junco se curva,
venid a ver sus notas en flor como se casan.

III

Oscurece en tus ojos y escucho su música
porque en su cristal canta Venus,
en él se mira mi deseo con turbia transparencia.
Oh, qué desnudo queda tu pensar,
ay, qué luz en mis pupilas y en mi espalda qué frío,
ay, como cimbreas música en tus caderas.
Cuando llegue la noche de aquelarres
rasgaré tus enaguas.

*